Abriga tu inmunidad
Abriga tu inmunidad
La madre naturaleza es tan sabia, que nos proporciona alimentos de acuerdo a cada temporada del año. En esta edición, te compartimos 6 alimentos locales y de temporada que favorecen la modulación del sistema inmune.
Si bien no existe una fórmula mágica para potenciar el sistema inmunológico, adoptar hábitos saludables puede contribuir a su óptimo funcionamiento. Una alimentación completa y equilibrada, rica en frutas, verduras y otros nutrientes esenciales, es fundamental. Además, el manejo del estrés, la actividad física regular y un sueño adecuado son factores clave para mantener nuestro sistema de defensa en buen estado.
GUAYABA
Tanto la fruta como las hojas, destacan por sus múltiples beneficios para la salud que las han convertido en un ingrediente clave en diversas culturas. La vitamina C presente en la guayaba es un nutriente esencial para modular el sistema inmunológico, protegiéndonos de enfermedades. Además, sus antioxidantes ayudan a combatir los radicales libres, que dañan las células y contribuyen al envejecimiento prematuro (1).
Un dato: Tres guayabas aportan cinco veces más vitamina C que una naranja.
TEJOCOTE
Esta deliciosa fruta de origen mexicano, además de ser baja en calorías (dos piezas aportan solo 52 kilocalorías), puede favorecer a nuestro sistema de defensa. Es rica en provitamina A, micronutriente antiinflamatorio que desempeña un papel en la regulación del sistema inmunológico. Esta vitamina es como la gasolina para nuestro sistema inmune. Sin ella, nuestras defensas no podrían crecer ni luchar contra las enfermedades (2).
Un dato: El nombre de tejocote proviene del náhuatl y significa piedra de sabor agridulce (3).
MANDARINA
La vitamina C presente en las mandarinas puede ayudar a proteger el sistema inmunológico al actuar sobre los linfocitos T, un tipo de glóbulo blanco que ayuda a mantener un nivel saludable de estas células y proteger al cuerpo de las infecciones. También, reduce la inflamación, que es un componente clave de la respuesta inmune (4, 5).
Un dato: La mandarina puede ayudar a reducir la gravedad de las reacciones alérgicas gracias a la hesperidina y la naringenina, dos antioxidantes presentes en la cáscara
CALABAZA DE CASTILLA
La mayoría de los beneficios para la salud de la calabaza se centran en su contenido de fibra y micronutrientes como el betacaroteno, la vitamina A, la vitamina E contenida en sus semillas y el zinc. La deficiencia de zinc puede debilitar la respuesta inmunitaria, haciéndonos más susceptibles a infecciones. Además de estos nutrientes, la calabaza contiene compuestos bioactivos que tienen propiedades inmunomoduladoras (6, 7).
Un dato: Aunque botánicamente la calabaza es un fruto, nutrimentalmente el Sistema Mexicano de Alimentos Equivalentes la clasifica como verdura.
BETABEL
El color rojo del betabel se debe a un compuesto llamado betanina que ha demostrado tener potentes propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Estas propiedades pueden ayudar a mejorar la función del sistema inmunológico al reducir el estrés oxidativo y la inflamación en el cuerpo. Además de la betanina, el betabel es rico en vitamina C, folatos y potasio (8, 9).
Un dato: Las antiguas civilizaciones solo consumían las hojas, la pulpa del betabel se utilizaba como medicamento para combatir los dolores de muelas y de cabeza (10).
ZAPOTE NEGRO
El zapote es una fruta mexicana cargada de compuestos fenólicos con actividad antioxidante y nutrientes relacionados con el buen funcionamiento del sistema inmunológico como la vitamina C y E. También es muy rica en fibra que favorece la microbiota intestinal. Tres cuartas partes de las células que conforman el sistema inmunológico se encuentran en la microbiota intestinal. Para mantener una microbiota saludable, es necesario incluir alimentos ricos en fibra (11).
Un dato: El principal productor de zapote es Campeche, seguido de Veracruz y Yucatán (12).
El sistema inmunológico -como su nombre lo indica- es todo un sistema, no una sola entidad por tanto, no existe ningún alimento que por sí solo estimule su buen funcionamiento. El estilo de vida y la dieta en general, son factores clave para fortalecerlo.
5 Claves para mejorar tu inmunidad
Realizar actividad física de forma regular.
Disminuir el estrés.
Dormir 8 horas diariamente.
No fumar.
Mantener una correcta higiene.
