Aspartame y cáncer
Seguramente has escuchado en las noticias la advertencia sobre el aspartame como posible carcinógeno. ¿Debemos de alejarnos de este endulzante?
Los endulzantes -en general- se dividen en calóricos y no calóricos; naturales o artificiales. Así como por su estructura (polialcoholes, hidratos de carbono, glucósidos y otros). Un ejemplo de endulzante natural calórico es la miel o el azúcar de mesa. Un endulzante natural no calórico, es la stevia, y el aspartame entra en la clasificación de endulzante artificial no calórico.
Este controvertido edulcorante es aproximadamente 200 veces más dulce que el azúcar. Se obtiene mediante la combinación de fenilalanina y de ácido aspártico.
Junto con otros de su categoría como la sacarina y la sucralosa, se han utilizado -en exceso diría yo- durante los últimos años con la esperanza de comer cosas dulces sin sumar calorías en la dieta, además de que son -mucho- menos costosos para la industria alimentaria que el azúcar de caña y otros edulcorantes naturales.
El aspartame, desde los años 80 es uno de los endulzantes más comunes del mundo. Se utiliza en refrescos, bebidas, yogures, postres, pasta de dientes, chicles, entre otros productos.
Y ahora… ¿qué es lo que andan diciendo todos por ahí?
Este mes de julio del 2023 se espera que sea catalogado por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés ) como "posiblemente cancerígeno para los seres humanos".
Aca hay algunos puntos a comentar:
1. Esta agencia evalúa si algo es un peligro potencial en función de toda la evidencia publicada.
La IARC utiliza 4 clasificaciones. Los niveles se basan en la fuerza de la evidencia, en lugar de cuán peligrosa es una sustancia.
Grupo 1- Cancerígeno en humanos. Se usa cuando hay pruebas suficientes de que el agente causa cáncer en las personas (estudios epidemiológicos). En esta categoría están las bebidas alcohólicas y la carne procesada.
Grupo 2A- Probablemente cancerígeno en humanos (como los anabólicos).
Grupo 2B- Posiblemente cancerígeno en humanos. Esta clasificación se usa generalmente cuando hay evidencia limitada de “carcinogenicidad en humanos”. Incluye:
Verduras en escabeche asiáticas tradicionales.
Aloe Vera
Campos electromagnéticos de radiofrecuencias asociados al uso de teléfonos celulares y estancias en tintorerías…
Y -al parecer- próximamente estará el aspartame (el 14 de julio se publica el informe).
Grupo 3. No clasificable como cancerígeno en humanos. Esta clasificación se utiliza cuando la evidencia de carcinogenicidad en humanos es inadecuada. Según IARC, esto incluye: uso de productos para teñir el cabello, uso de luces fluorescentes, agua potable clorada, aceites minerales altamente refinados, té, tintas de impresión, entre otros.
Consultar las 4 clasificaciones con detenimiento: https://monographs.iarc.who.int/agents-classified-by-the-iarc/
Hay dos comités de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que están evaluando esta situación. Ambos se integran por expertos independientes en salud de todo el mundo.
La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer examina la evidencia existente para determinar si el aspartame es peligroso, y el Comité Conjunto de Expertos en Aditivos Alimentarios proporcionará recomendaciones sobre la cantidad de aspartamo que una persona puede consumir de forma segura.
Ambos informes se publicarán el 14 de julio.
2. Debemos leer más allá de los titulares. Consumir este tipo de productos probablemente es seguro, pero no recomendable… o no para población general.
3. Este endulzante generalmente viene en alimentos ultraprocesados que no son recomendables en nuestra alimentación diaria. Ni en personas sanas, ni en personas con obesidad, ni en personas con diabetes.
4. El uso excesivo de este tipo de edulcorantes distorsiona el sabor real de los alimentos, de ahí que pensemos que el azúcar de mesa ya no endulza como antes. O, que te comas una manzana y no te sepa a nada.
5. En el caso de los refrescos de dieta, evidentemente yo les podré decir que la mejor hidratación es y será con agua simple, pero también entiendo el gran apego que la población mexicana tiene sobre bebidas azucaradas, por lo que este tipo de productos pueden ser utilizados como una estrategia de puente para ir disminuyendo el consumo de refrescos, jugos y demás bebidas azucaradas en la dieta diaria.
6. Recordemos que en la dosis está el veneno. Si bien la exposición a estas sustancias posiblemente aumente el riesgo a padecer un tipo de cáncer, existen otros factores que determinan la enfermedad, como la genética, el ambiente, la alimentación en general, el estilo de vida, la dosis y tiempo de exposición al carcinógeno, entre otros.
7. También, debemos considerar que este tipo de endulzantes no son la solución al sobrepeso (el pasado 15 de mayo la OMS también sacó un informe sobre esto) y tampoco hay evidencia suficiente de su inocuidad en ciertas poblaciones.
¿Qué tanto es tantito?
Desde 1981, expertos en aditivos alimentarios de la OMS han dicho que el aspartame es seguro de consumir dentro de los límites diarios aceptados. Por ejemplo, un adulto que pese 60 kg tendría que beber entre 12 y 36 latas de refresco light, todos los días para estar en riesgo.
Si bien la opinión científica está -muy- dividida, es importante promover el consumo de alimentos naturales y endulzar solo cuando sea necesario y con la menor concentración posible, ya sea de edulcorantes naturales o artificiales, con o sin calorías.
El mejor endulzante es el que utilizas con moderación.